1. Aceptar las emociones que vayan surgiendo, gestionarlas y si en algún momento necesitamos ayuda, pedirla
2. Escuchar y atender a nuestras necesidades
3. Reducir estresores y aumentar el autocuidado
4. Apoyarnos con nuestro entorno más cercano
Los procesos de reproducción asistida son considerados como un factor vital estresante, por todo lo que conllevan. Lo primero y más importante es permitirse tener y sacar las emociones que se van sintiendo.
En segundo lugar, es muy importante, ir reflexionando y atendiendo a nuestras necesidades, es decir, escucharnos a nosotros mismos para saber que nos apetece en cada momento.
También es necesario en este momento, reducir estresores y aumentar el autocuidado, para poder centrarnos más en nuestro bienestar.
Por último, apoyarnos en nuestro entorno más cercano nos permite sentirnos acompañados, escuchados y evitar los sentimientos de soledad.