Fertilización in vitro (FIV)
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Tratamiento enfocado a un segundo embarazo o para realizar otro intento en un ciclo FIV.
En ocasiones se decide vitrificar los embriones restantes de un ciclo FIV para su futura utilización. La crío transferencia es la transferencia del mejor embrión de la vitrificación porque se ha decidido querer un segundo embarazo o volver a intentarlo de nuevo.
Para poder realizar la transferencia de embriones congelados es necesario que:
En la clínica: la futura madre se ha de preparar hormonalmente para recibir el embrión. Simplemente, se le administrarán unos parches de estrógenos (o en ocasiones por vía oral) para desarrollar su endometrio de la forma correcta. El doctor irá controlando con ecografías y analíticas de sangre su estado durante 10-15 días.
En el laboratorio: cuando el endometrio está preparado, se desvitrifican los embriones de la paciente. Después, se ponen en cultivo para su total recuperación y se analizan de nuevo. Finalmente, se transfiere los embriones al útero mediante el proceso habitual, con un catéter y mediante seguimiento ecográfico.
La técnica de vitrificación de embriones se ha desarrollado considerablemente en los últimos años. Actualmente, un embrión vitrificado no pierde sus características, sino que se mantiene perfecto por tiempo ilimitado. Es decir, que por ser transferido en un ciclo posterior, no tiene menos probabilidades de embarazo.
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